NO HAY VACUNA QUE LES VENGA BIEN...

A esta altura de lo que conocemos de la adquisición de la vacuna Sputnik V. tendría que sorprendernos la reacción contraria de algunos medios y de muchos ciudadanos, pero no nos sorprende.
Al igual que las tapas- catástrofe de dos semanas atrás con la suba del dólar paralelo, la noticia inversa de la baja del blue y la derrota de la movida devaluatoria, no tuvo una repercusión equivalente.
Ahora es la vacuna rusa lo que molesta, porque molesta cada logro grande o pequeño o modesto o superlativo..
Les molesta el gobierno, les duele todavía la derrota del proceso de saqueo y entrega de esos cuatro años desastrosos que tanto blindaron esos partícipes necesarios del desastre neoliberal.
Ahora vienen los cuestionamientos a la vacuna rusa, como si el virus tuviera ideología, como si el muro de Berlín no hubiera caído, como si Rusia, objetivamente un equilibrio al gendarme yanqui en el tablero mundial, no fuese tan capitalista como el resto de Europa.
La Sputnik V.(ve, de vacuna) es derivada de la elaborada por Rusia contra el MERS y se anota entre los logros de la ciencia rusa en materia de vacunas, entre ellas la del Ébola.
Tiene algunas ventajas comparativas, viene en polvo a diluir en el momento de la aplicación y no requiere de bajísimas temperaturas como otras, lo que facilita su almacenamiento, traslado y conservación.
Y tiene la ventaja principal de ser la que está más adelantada.
El Estado Argentino mantiene sus negociaciones con los otros laboratorios que también tienen vacunas en fase 3, al igual que la Sputnik, que deberán ser aprobadas por la ANMAT y son producidas y adquiridas a riesgo por la premura que impone la pandemia.
Cuando se avizora una solución definitiva para la pandemia que destruye vidas y economías, cuando tendríamos que ser un unísono perfecto y esperanzado cual labradores bajo la lluvia después de la sequía, se levantan voces de desencanto infectadas de odio inoculado..
Y para eso todavía no hay vacuna.